Este hongo (Fomitiporia Ellipsoideus) se corta en láminas y se procesa de la misma manera que la piel animal, aunque con un curtido totalmente natural. Cada pieza de piel curtida mide aproximadamente 40cm x 15-20cm, y procede de un único hongo. Además de evitar que proliferen las bacterias, tiene una alta capacidad de absorber la humedad y liberarla. Estos dos factores son realmente importantes, por ejemplo, para la fabricación de suelas interiores de zapatos o de correas para relojes. También es importante apreciar su transpirabilidad y su natural repelencia al agua.
Al no utilizar ningún tipo de químico, es una piel no tóxica, ideal para su uso en productos en contacto directo con la piel humana. Su apariencia visual es similar a la piel de ante, pero mucho más suave.
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